El metabolismo es como el motor del cuerpo que convierte los alimentos en energía. Cuando algo no funciona bien en ese motor, aparecen los trastornos metabólicos, problemas que pueden afectar el crecimiento y la salud de los niños. Aquí te contamos sobre los más comunes:
Diabetes Tipo 1:
- Es una enfermedad autoinmune en la que el cuerpo deja de producir insulina, una hormona esencial para usar el azúcar como energía.
- Síntomas comunes: Sed excesiva, hambre constante, pérdida de peso sin explicación y cansancio.
- Tratamiento: Inyecciones de insulina y una dieta saludable.
Obesidad Infantil:
- Se produce cuando hay un desequilibrio entre las calorías que se consumen y las que se queman.
- Complicaciones: Puede llevar a problemas como resistencia a la insulina, hipertensión y colesterol alto.
- Tratamiento: Cambios en la alimentación y actividad física regular.
Hipercolesterolemia Familiar:
- Un trastorno genético donde los niveles de colesterol son altos desde la infancia.
- Riesgo: Aumenta la posibilidad de enfermedades cardíacas en la vida adulta.
- Tratamiento: Dieta baja en grasas y, en algunos casos, medicamentos.
Resistencia a la Insulina:
- Es cuando el cuerpo no usa la insulina de manera eficiente, lo que puede llevar a diabetes tipo 2.
- Síntomas: Oscurecimiento de la piel en zonas como el cuello y las axilas (acantosis nigricans).
- Prevención: Mantener un peso saludable y actividad física diaria.
Los trastornos metabólicos pueden prevenirse o tratarse con hábitos saludables. Si notas cambios en el peso, energía o crecimiento de tu hijo, consulta con un médico. ¡Un diagnóstico temprano puede hacer la diferencia!